Estrella Coja empieza la segunda vuelta de la liga con una plácida victoria ante el A.C. Derby (3-0)
Los blanquinegros no aflojan y mantienen su condición de invictos tras la disputa de ocho jornadas de Liga. La victoria ante el Derby combinada con las inesperadas derrotas de Incubus y Desesperados ampliaron el margen de La Coja con sus inmediatos perseguidores a 5 puntos, a pesar de haber disputado un partido menos que el resto. Una distancia que, visto el nivel del juego que está desarrollando el líder, se avecina insalvable para sus rivales.
Bastaron un par de minutos para que Estrella Coja evidenciase su superioridad en el terreno de juego: física, táctica y técnicamente. El esférico pasaba por delante de los multicolori sin que estos pudieran hacer nada para apoderarse de él y la transición del juego blanquinegro era cada vez más y más rápida. Una bonita jugada entre Paredes y Tomy terminó con un bonito remate cruzado del delantero que el portero no logró detener.
Sin tiempo para reaccionar, otra buena combinación entre Paredes y Tomy con pase final de éste último para el capitán Crusellas, que se había sumado al ataque en una impresionante carrera en la que se pateó toda la banda derecha a gran velocidad, terminó con un espectacular chute cruzado desde el suelo del polifacético mariscal de campo de La Coja, que metía de este modo su primer gol de la temporada y el 2 a 0 para los blanquinegros en menos de 10 minutos.
A partir de ahí, la tónica habitual de los partidos del líder: solidez defensiva, control del balón, contraataques devastadores y... ¡premio!, rival desquiciado. Las patadas y agarrones se sucedieron por parte de los jugadores del Derby, que eran incapaces de hallar el modo de superar limpiamente a los locales y que trataron de hacerlo a base de triquiñuelas y amenazas insustanciales. ¿Pero qué clase de organización se puede esperar de un equipo que, por no ejercer como tal, permite que cada jugador escoja una camiseta diferente para jugar los partidos? En fin... Lejos de paralizar a los 10 Cojitos, la dureza del rival incitó todavía más a los locales a mantener el orden establecido.
La segunda parte comenzó intensa. Héctor estuvo cerca de meter un gol de portería a portería pero su balón se estrelló al palo. La misma suerte corrió un acrobático remate de Levi a la salida de un córner, que cogió por sorpresa a los defensas pero que se fue fuera tras impactar en el larguero. Los ataques desordenados de los visitantes no eran suficientemente contundentes como para batir a Héctor y eso hizo intensificar su frustración. Prueba de ello fueron las pataletas de Jancker o Topogigio, que ejercieron de Chico Pacha y se pasaron toda la segunda mitad quejándose al árbitro por unas faltas que sólo su desconocimiento del reglamento podía justificar; y que no fueron capaces de comprender el motivo por el que jugadores como Paredes, Manel, Crusi o Xander se adelantaban a todos y cada uno de sus movimientos. Mientras tanto, la presión ofensiva de Tomy y Bala hizo aumentar considerablemente los balones perdidos por los multicolori, que apenas llegaron a campo contrario en toda la segunda mitad.
Y cuando más acelerado estaba el partido llegó el tercer gol. Una buena internada del incansable pichichi Tomy al área rival y un mal despeje de Jancker propiciaron que el rival cayera muerto a los pies de Levi, que se encontraba en la frontal del área y remató con fuerza tal y como le vino. Hubiera sido un gran gol en caso de haber entrado directamente, pero el remate de Levi se recordará no por ser de bella factura sino porque el Topogigio de marras, en un intento desesperado por evitar el gol, lanzó un jersey que casualmente tenía a mano y que acabó desviando la trayectoria del balón. Aún así, la potencia del disparo permitió que éste se acabase introduciendo en la portería rival y que el 3 a 0 subiera al marcador.
Los minutos finales fueron de exhibición por parte de Estrella Coja y de desespero para los visitantes, que no supieron encontrar su juego en ningún momento y que se fueron tremendamente abatidos hacia los vestuarios tras el pitido final del colegiado.
UNO A UNO
HÉCTOR--> PLÁCIDO
No tuvo ninguna dificultad para detener los lanzamientos del rival. El portero menos goleado de la categoría se mostró seguro y tranquilo en todo momento.
LEVI --> ACTIVO
Realizó una actuación muy completa y empezó la segunda vuelta del mismo modo que lo hizo con la primera, marcándole un gol al AC. Derby.
TOMY --> LUCHADOR
Descentró la defensa con sus pases imprevisibles y se mostró como el jugador más en forma de La Coja con su gran entrega en el campo.
CRUSI --> GOLEADOR
El capitán mostró una vez más su carisma en el campo, ordenó la defensa y aportó seguridad y control al mediocampo. Sin dejar a un lado sus labores de contención del rival, Crusi estuvo más ofensivo que nunca y logró anotar un gol de bella factura. ¿Quién da más?
MANEL --> FÁCIL
¿Para qué complicarse la vida con pases cortos si perfectamente puede soltar un centro a 30 metros y dejar el balón a los pies de sus compañeros? Así hace las cosas el #5 de Estrella Coja. Bravo.
XANDER --> MURO
Cada vez menos delanteros son capaces de zafarse de sus marcajes. ¡Felicidades maño!
BALA --> INALCANZABLE
Nadie es capaz de parar en velocidad al mediático delantero blanquinegro. Ante el Derby dio muestras de su tremenda calidad y del gran trabajo en equipo que realiza.
PAREDES --> IMPARABLE
Hace falta mucho más que un fuerte agarrón de pantalón o camiseta para detener a este tremendo crack. Recupera balones, se saca de la chistera asistencias imposibles y aporta un espíritu combativo que se contagia al resto de sus compañeros.
EL BUFÓN DE LA COJA
Primero fue un ortopédico cabezazo que en lugar de dirigirse a la porteria se elevó unos cuantos metros de manera casi vertical a la cabeza del joven, que a su vez se estuvo varios segundos oteando el horizonte preguntándose dónde podría reencontrar el preciado balón; luego llegó el turno de evidenciar que sin isquiotibiales no se puede ir por el mundo y el “Ay va la ostiaaaa”; y para rematarlo llegó la jugada del tercer y definitivo gol de La Coja, en la que nuestro chistoso protagonista empalmó bien un balón muerto en la frontal del área y cuando se las prometía felices... Un rival no tuvo otra idea mejor que intentar evitar el gol lanzándole ¡¡UN JERSEY!! En fin... Iremos informando de las gloriosas aventuras, que seguro las habrá, de nuestro amigo el Bufón.
En primer lugar, poner el cuerpo para proteger el balón NO se puede considerar falta a no ser que aquél que lo hace se desentienda completamente de éste o utilice sus brazos para impedir el paso al rival. Segundo, sería bueno que no consideraseis un honor para vuestros oponentes el hecho de que, en un momento dado del partido, prefiráis hacer trizas sus vestimentas cual hiena en celo en lugar de darle la patada de turno: ¡¡Más que nada porque no lo es (¿verdad, Paredes?)!! Otra cosilla importante: Intentar engañar al árbitro forma parte de la picaresca del fútbol, pero por Dios, una vez lo habéis convencido de que la marca de tacos que ha quedado en la espinilla de vuestro rival no proviene de vuestras botas, entrad en razón y no os creáis vuestra propia mentira, que algunos empezamos a pensar que hay espíritus en el campo que se dedican a dar rodillazos en la rabadilla o codazos en la espalda... Tened un poquito de delicadeza, por favor. Y por último, pero no por eso menos importante, haced el favor de saber perder, ¡que parece mentira que a vuestra edad nadie os haya explicado todavía la importancia de la buena educación en esta perra vida!